mientras haya un asunto que tratar/ dependerá enteramente
del tratamiento el que vuelva a encenderse el fuego
HENRY JAMES
no fueron los ojos de la luna/ ni el vientre de venus
-silenciosos testigos-/ de la consumación ...
TATY CASCADA
pregunté a la palabra el origen de mi existencia
pero ella calló
LA AUTORA
no es herida ni sangre que tengo
entre dedos manchas de humedad contraje
goteras
en un mismo goteo
sin embargo
en mi o m b l i g o
la palabra tampoco existe.
* Imagen extraída de internet
Entradas
Bella comparación entre las goteras y la separación de la palabra ombligo, sin cuya unión de las letras no existe la palabra. Profundos, como siempre, tus poemas.
ResponderEliminarEncantado de seguir leyéndote, aunque no pueda venir tan a menudo.
Saludos.
el ombligo, estimado Carlos, es el centro de cualquier cosa, y, asimismo, esa cicatriz que queda en medio del vientre después de desprenderse el cordón umbilical,
ResponderEliminaraquel origen o "causa de algo", en este poema,... la palabra apropiada, oportuna para ejercer una relación recíproca con el lector...
gracias por volver a mi casa virtual,
abrazobeso desde Chile, Ro
Detrás de la palabra está el caos. Cada palabra es una valla, un barrote, pero no hay ni habrá jamás suficientes barrotes para formar la reja… Henry Miller
ResponderEliminarla palabra no entiende de origen sino de orden, las goteras abundan como los charcos en el ombligo, se convierten en cadenas si no se repara pronto la grieta, buen aviso en tu poema, como siempre, original e impactante. Abrazos desde la Alhambra.
No es herida ni sangre es goteras en un mismo goteo, pero en su ombligo la palabra no existe.
ResponderEliminarLo veo desde otro ángulo. La hablante no tiene dolor, herida o daño alguno, pero hay algo que molesta al lector que insiste en adentrarse en el personaje ficticio, tal vez, para resolver el drama en profundidad.
He, aquí un logro del poema: Interesar, hacer trabajar al lector. ¿Qué atribula al personaje? La gotera, y también haciendo como personaje de Conan Doyle, cogito, esta cae, cae, cae y cae….y termina enfermándola de aburrimiento, hastío, fastidio, porque aún en su fuero interno, dicha palabra tampoco tiene cabida.
Un poema interesante y con las cualidades que he expresado, muy especialmente porque, bien o mal, esta comunicación autor, sujeto, lector, permite enriquecernos a nosotros mismos.
Tu Manolete querido.
www.poesiasur.com
Mi origen, centro de la creacion, muy bello Rocïo
ResponderEliminaramo las palabras, bella e inteligente Carmen, hasta las más sucias que puedan llegar a ser, pero que se presenten, y no se hacinen en el centro del silencio como si fuera una copa en desuso.
ResponderEliminarabrazobeso desde "la piedra del águila" en Chile
mi Manolete amado, la verdad es que si, cae, cae, cae sólo el silencio, aunque ese silencio humedece los dedos de la hablante, no llega la palabra que se espía, la añorada, la que merodea los oídos... porque ella calla,
ResponderEliminaro acaso le tapen le escondan la boca?
siempre tuya, Ro
Taty Cascada dijo en facebook:
ResponderEliminar"El ombligo, origen de carne sangroso, que nos congrega a todos bajo un mismo lamento, porque conserva el acervo primigenio. Y ese sagrado ombligo -depresión intermedia- del vientre, posee voz y palabra, y la levanta airosa, rugiendo en el pubis, llorando en el miembro viril..."
Miguel Ángel, sin la palabra no existo... razón por la cual me atormento sin ella.
ResponderEliminarabrazobeso alado, Ro
Taty querida, tenéis una aguja magnética... por cierto, muy seductora... entonces la palabra ruge en cada gotera...
ResponderEliminarentonces, también, la sonrisa es perfecta.
abracitos entre el ulular del viento marino y el puma de nahuelbuta.
Interesante poema querida Rocío, los dedos se manchan en busca de esas palabras que no salen, sólo hay un goteo doloroso sobre una página en silencio.
ResponderEliminarSaludos cariñosos de Marianela.
los dedos buscan en mi cuerpo ESA palabra que no llega... seguiré esperando,
ResponderEliminargracias comadre por traer las tuyas,
bendiciones, Ro
Ombligo ,marca- flor de la existencia.Callado testigo del nudo que aprisiona el silencioso goteo de una vida.
ResponderEliminarEsto que acabo de escribir,me lo motivó tu poema.¡Gracias por ser siempre musa inspiradora y vibración sugerente,en región expandida de un poema..
Besos!
Elsa Tébere
mi Elsa adorada, qué mayor placer me produce ser la musa de tan distinguida poeta argentina... sólo el amor sabe de vidas compartidas en poesía,
ResponderEliminartqm, Ro
Arriesgas mucho, Rocío. Quizá algo de puntuación, sería conveniente en el poema, pero, hija, tu eres la autora y tu mandas.
ResponderEliminaragradezco tu sugerencia, Gastón... sin embargo despojo de toda atadura a la "señorita personalidad", es decir, mi poesía, porque es la libertad que ella necesita para seguir conmigo. ambas nos oxigenamos de la misma forma nos vivificamos.
ResponderEliminarabrazobeso desde Chile hasta Madrid, Ro
el ombligo es el génesis
ResponderEliminarla palabra existe por antonomasia
es nuestra tarea... nombrar
besitos y luz
pasa un precioso fin de semana Rocío
y mira que tu nombre se forma de gotas
así es, Licha querida, la acción y resultado, el ejercicio y práctica, del uso de la palabra nos expone, nos enseña, nos da a conocer, entre la inmensa gama de poetas en el mundo...
ResponderEliminarrenovar, restaurar, reanudar, modernizar lo ya nombrado y lo innombrado para otorgar un nuevo énfásis, es nuestro desafío.
gracias, preciosa, por traer esta figura retórica - antonomasia - a la conversación.
Ombligo
ResponderEliminar( A Rocío)
Ombligo nudo
de la vida misma,
región del centro
de este cuerpo mío,
sobre tu marca
la luna dejó un beso
antes de que la luz
tocara mis sentidos.
... Ombligo puente
de sangres y de sueños,
camino circular
de los delirios,
nido de silencios
que acurrucan
la tenue y vacilante
piel de un niño.
Cuando Dios te pensó
hizo primero
a las manos
que atarían
en ti el hilo.
Ombligo al que Rocío L'Amar
le dio un poema
que fue el inspirador
de éste que escribo.
Elsa Tébere
Elsa, gracias por hacer de nuestros ombligos un lacito de amor, un canto a la amistad,
ResponderEliminarbesitos, Ro
tanto la sangre como el agua son símbolos de la vida, y de pasaje. Si bien la ausencia se hace presente, la misma es promesa de encuentros, descubrimientos, el liquido que corre y es vida ha de llevar al yo lírico a nuevos puertos, donde ya no se vean viejos barcos, donde la madre quedó atrás, lo creado fue ya separado y sólo es cicatriz y promesa de nuevos renaceres, tras las muertes, siempre necesarias. ABRAZO
ResponderEliminarsi la palabra fuera una prostituta, estaría conmigo, estimada Silvia, si me mirara con más fuerza, dolería,
ResponderEliminarla que apetezco es la fea más hermosa...
porque es como tenerle miedo a la muerte, y enamorarse de ella.
abrazos, mi reina
Creo que has dado con la definición de la poesía, y de paso de la vida...temerle a la muerte y amarla, eso siento, así vivo y escribo, en el borde del abismo disfrutando y padeciendo el vértigo. También necesito algo nuevo que me sorprenda en ambos ámbitos, algo que le de nuevos sentidos a este estar aquí y ahora...el asunto es que los sentidos debe inventarlos uno.BESOS.
ResponderEliminary yo agregaría, mi reina, le pertenecemos porque no le pertenecemos... porque no se trata de lo que escribimos en un día bueno, sino en un día malo.
ResponderEliminarabrazobeso.